La vieira (pectinidae) es un molusco que se ha convertido en el símbolo de los peregrinos del Camino de Santiago. ¿Por qué? Existen varias teorías. Según algunos, al ser un molusco típico de Galicia, los peregrinos la llevaban de vuelta a sus casas como prueba de haber completado el Camino. (Curiosamente, la especie más asociada con el Camino, la conocida como pecten jacobaeus, es en realidad propia del Mediterráneo, mientras que en Galicia es popular otra especie, conocida como pecten maximus).
Otras teorías afirman que se deben a una conocida leyenda medieval según la cual, mientras se transportaba el cuerpo del Santo a Galicia, uno de los caballos cayó al agua, y emergió cubierto de conchas. (Una variante de esta leyenda afirma que, mientras se desembarcaba el cuerpo del santo, el caballo de un jinete que se encontraba en la playa se asustó y corrió hacia el mar, del que emergió cubierto de conchas).
Además de este contenido simbólico, la vieira también cumplía una función práctica. Según se afirma, durante la Edad Media, los peregrinos llevaban estas conchas durante el trayecto, y al presentarse ante abadías, iglesias, casas… los locales les proporcionaban tanta comida y bebida como cupiera en una de ellas.